Si existe un material ecológico y 100 % reciclable de forma indefinida es bien el vidrio. Por ello, se lleva utilizando y reutilizando desde tiempos inmemorables. Hay que saber que se trata de un material obtenido a partir de la arena sílice y fabricado mediante la fundición de la misma a unas temperaturas que suelen alcanzar los 1,200 a 1,500 grados centígrados. Es con ello, un material que no pierde sus propiedades ni su calidad durante el proceso, sin que sea importante su estado de conservación y que, ¡cereza sobre el pastel!, no genera subproductos tóxicos. Con lo cual, no es de extrañar que haya atravesado los tiempos para llegar hasta el día de hoy.
Pues, es un material que permite generar materia prima a partir de la que ya existe, lo cual lo hace muy aprovechable. En una gran mayoría de los procesos industriales en los que se utilizan hornos para la fundición de la materia, es fundamental poder visualizar lo que está sucediendo en el horno para poder controlar el proceso. Por ello, se instalan cámaras para el interior de los hornos, lo cual reduce considerablemente los tiempos de producción y permite un ahorro energético considerable durante el proceso de calentado o fundido, así como un control y monitoreo continuo de lo que está sucediendo en el interior del horno.
Para que este proceso se desarrolle de la mejor manera posible es importante recurrir a los servicios de una empresa especializada en este sector. Ibertrónix Infrared & Vision S.L. es una de ellas. Se trata, en efecto, de una ingeniería especializada en la medición de temperatura mediante sistemas termográficos y pirómetros infrarrojos y en la visualización en el interior de hornos. Trabajan con las marcas líderes en el sector para poder ofrecer a sus clientes la solución que más se ajuste a sus necesidades. En mediciones infrarrojas disponen de sistemas de medición infrarroja puntual, tanto fijos como portátiles y también de cámaras termográficas que se ajustan a todas las aplicaciones.
Tipos de hornos para el vidrio
Son muy distintos y variados los tipos de hornos para el vidrio que existen para fundirlo. No obstante, cada uno está adaptado para el tipo de producto que va a ser manufacturado. Ello significa que después de haber pesado las materias primas con el objetivo de obtener un vidrio con una determinada composición, es necesario fundir la mezcla para poder obtener una masa cuya viscosidad debe ser la correcta para formar las piezas finales. Esta fusión de la mezcla se hace en hornos que pueden operar en proceso continuo o discontinuo.
Este detalle es primordial para clasificar los tipos de hornos que existen y que son los siguientes: hornos de crisoles, hornos tanque y hornos Day Tanks. Todos los hornos son construidos con materiales refractarios especiales que, obviamente, tienen que soportar temperaturas muy elevadas y ambientes físico-químicos sumamente agresivos. Hasta mediados del siglo XIX, sólo los hornos de crisoles eran los que se utilizaban en la fusión del vidrio. A día de hoy, éstos ya sólo se utilizan en la cristalería manual o para los vidrios especiales, etc. Es a partir de finales del siglo XIX cuando se inaugura una nueva era de hornos para el vidrio.
A partir de entonces, se fabrica en régimen continuo y se aplican procesos automáticos de conformado en sus distintas modalidades. Estos hornos son capaces de producir grandes cantidades gracias al sistema de regeneración térmica que posee. Este método emplea dos cámaras que funcionan de manera alterna como intercambiador de calor. En su interior, éstas llevan un empilaje de material refractario que hace oficio de acumulador térmico. De esa forma, estos hornos tanque permiten el mantenimiento e uniformidad de las temperaturas en todas las zonas del tanque, lo que garantiza la rigurosa constancia de viscosidad necesaria. Las ventajas propias a estos hornos en comparación a los de crisoles, es que consumen menos energía y que el material refractario dura más tiempo. En cuanto a los hornos Day Tanks, éstos son la combinación de un horno de crisoles y un horno tanque. Sólo disponen de una cámara y el proceso de producción es similar al de los crisoles. La ventaja que tienen estos tipos de hornos es la de poder alcanzar temperaturas superiores a las de los hornos de crisoles. Dicho todo ello y sea cuál sea el tipo de horno elegido, lo más importante es siempre recurrir a auténticos profesionales en la materia como lo son los de la empresa catalana Ibertrónix Infrared & Vision S.L., para no llevarse malas sorpresas o sustos innecesarios.